Las principales formas de contagio del VIH a los niños se dan durante el embarazo, en donde el virus llega al feto a través de la circulación sanguínea compartida; o después del nacimiento, por medio de la leche materna. Pero estas no son las únicas. La transfusión de sangre o el trasplante de un órgano de un donante infectado, son otras.
Los síntomas de la infección aguda por VIH generalmente son: diarrea, fiebre, dolor de cabeza, úlceras en la boca, rigidez o dolor muscular, erupciones y ganglios linfáticos inflamados. Sin embargo, muchos pacientes no los presentan al momento del diagnóstico.
Si el VIH no es tratado, el niño infectado contraerá SIDA. Este síndrome hará a su organismo más susceptible a infecciones "oportunistas" que normalmente no se desarrollan en personas con un sistema inmunitario saludable.
Como padres, la mejor estrategia para prevenir el virus en sus hijos es realizarse las pruebas rápidas de VIH y así asegurar la calidad de vida de su familia. Otras recomendaciones preventivas son conversar con el médico si se desea tener un bebé y uno de los integrantes de la pareja está infectado y evitar la lactancia materna si la madre tiene VIH. Además existe una estrategia recomendada por UNICEF para prevenir el virus entre los lactantes y niños de corta edad. Esta se resume en cuatro frentes:
- La prevención principal del VIH entre las mujeres en edad fértil.
- Proporcionar asesoramiento adecuado y apoyo a las mujeres que viven con el VIH para que puedan tomar una decisión consciente sobre su futura vida reproductiva, con especial atención en la prevención de embarazos no deseados.
- Para las mujeres embarazadas que viven con el VIH, garantizar la prueba del VIH y el acceso a los medicamentos antirretrovirales.
- Una mejor integración de la atención del VIH, tratamiento y apoyo a las mujeres infectadas y a sus familias.
Recuerde que garantizar que ningún bebé nazca con el VIH es un paso esencial hacia el logro de una generación libre del SIDA. La mayor consecuencia de esta enfermedad es el sufrimiento humano. Si sospecha que usted o alguien a quien ama ha estado expuesto al VIH, no se demore en consultar a su médico.